viernes, 2 de mayo de 2008



RETIRO: María Elena, María del Carmen, Isabelita, Alicia, María Teresa, María Jesús, Iliana, Pepita, Ana Luisa, Padre Johnson y María Leonor, faltan María Mercedes y Alexandra, quien tomó la foto. El Señor necesita nuestros brazos para Su tarea, donde estés El te hace saber que está contigo y te necesita, su llamado es personal, es realmente tú con El, te distingue, El te necesita, te habla a ti, es un llamado que te hace. Dolores Sopeña se sintió enviada a los que están lejos también, a los que no aman a Dios porque no lo conocen. Seguimos su misión.




CHARLA DE MARIA JESUS GONZALEZ EN EL RETIRO ESPIRITUAL: Vengan ustedes a Mi Viña. Son las primeras palabras del Papa Juan Pablo II en la Encíclica Cristi Fidelis Laicis, la que nos servirá para trabajar este año 2.008 para todas las Catequistas y Voluntarias. En Su Viña El nos entrega esta parcela para que la cultivemos, es una llamada personal e intransferible a trabajar este año en OSCUS. Estamos a comienzos de curso y tenemos que conocer cómo orientar nuestras energías, de eso depende de cómo seguiremos. La rutina es un peligro porque un año se parece a otro, pero no es igual. Iniciemos un curso libre de rutinas, hay que despertar nuestro entusiasmo y creatividad. El Señor nos fortalece para después ir a entregar. Hay que intercambiar información. A veces la información no pasa a todas, les pedimos tiempo e involucrarse estando informadas. Nos preparamos con un encuentro con Dios, cara a cara, como Moisés subió al Montes Sinaì y estuvo cara a Cara con el Señor. Este es el momento de adquirir conocimientos nuevos, conocer todo lo que vamos a decir, esto ya más o menos lo sabemos pero es el momento de gustarnos nuevamente y profundizar. San Ignacio decía que hay que gustar y sentir, profundizar intensamente lo que el Señor nos descubre, permitir que Su Vida pase a nosotros, literalmente. El Señor es la cepa y nosotros los sarmientos, sin El nosotros no podemos hacer nada porque el sarmiento que no está inserto en la vid, se muere. Nuestra vida esta inserta en Cristo Jesús por el Bautismo, es el Señor el que nos regala la vida, así es que damos frutos que serán para los demás. Sentir que el Señor me envía a otra gente para que también den fruto, sentir que Su Vida pasa con nosotros y hoy nos envía nuevamente a la misión en Oscus el 2008. La Virgen es la primera evangelizadora, el Hijo de Dios se encarna en Ella. Si nosotros vamos a vivir una misión, un apostolado de fe, la tenemos que tener presente. El Papa Benedicto XVI anunció un año Paulino que empezará en Junio del 2.008 hasta Junio del 2.009. A San Pablo lo podemos poner como patrono a quien invocar de intercesor. El fue el Apóstol de los gentiles. El dijo “me basta tu gracia”. El Señor lo eligió para llevar Su Palabra a los que estaban lejos, a todos nosotros. Dolores Sopeña se sintió enviada a los que están lejos también, a los que no aman a Dios porque no lo conocen. Sugerimos comprar el Libro de la vida de San Pablo en las librerías católicas. Es un libro pequeño “para la gente que anda de prisa y la lectura de esta clase de libros es de absoluta necesidad.” San Antonio María Claret. El Señor necesita nuestros brazos para Su tarea, donde estés El te hace saber que está contigo y te necesita, su llamado es personal, es realmente tú con El, te distingue, te necesita, te habla a ti, es un llamado que te hace. No será todo igual al año pasado aunque hayan algunos aspectos que se parezcan, siempre hay ingredientes nuevos. El año pasado todo el mundo hizo algo, pero hay otro envío, hay otro impulso, hay un llamado nuevo, no le podemos decir “no, más tarde” porque la casa se está quemando y necesitamos el agua AHORA. Quiere que primero que todo, haya una relación nueva con El. Su llamada es para hacer un proyecto nuevo y una relación nueva con El. El nos ofrece amistad a la enésima potencia, El nos ofrece vida y salvación, crecimiento en Su amistad, en su relación con El, todavía no nos ha dicho todo y nos quiere revelar secretos, quiere que seamos unos cristianos más conscientes y que compartamos Su Misión, que hagamos un servicio de capacitaciòn, formación y evangelización, que sembremos incansablemente el amor y la fraternidad, que son las finalidades de OSCUS, y se hace dando charlas, haciendo gestiones para conseguir fondos, etc., pero hay que tener presente la gran final: hay que enseñar, consolar. Te metes en OSCUS y es como que estuvieras en un mar, estás rodeada de gente a la que puedes ayudar, prestar un servicio. Si estás inserta en Cristo Jesús estás brindando un fruto de mucha calidad, si tú das frutos, ellos también darán. Otra vez el Señor nos invita. Qué digo: “Sí, o No, más tarde”. Qué digo? Para saber qué tengo que hacer tengo que preguntarle primero al Señor, antes de decirle Sí o No. Preguntémosle: Qué quieres que haga? Quieres que de solo charlas o también otra cosa? Escuchar las posibilidades. Para asumir una tarea en Su proyecto, hay una parte que sería negarse a sí mismo, o sea, asumir que no me va a ser fácil, que vamos a tener dificultades. Habrá que asumir una escala de valores. Si no voy es porque hay otras obligaciones: mis hijos, mi marido, mis nietos. Tenemos cosas que son antes, pero hay otras cosas que no son tanto, a lo mejor falto porque me siento con pereza, cansada y no tengo ganas. Mantener mi compromiso aunque no tenga ganas. Todo no va a ser fácil, cuantas veces iremos hasta sintiéndonos un poco mal. Ver, intuir por dónde pueden venir las dificultades. Sentir que El me llama a una nueva relación con El y quiere enviarme a una misión este año. Voy a decir “sí o no?”. Sentir esto, pensarlo profundamente. Tratemos de compartir lo que hemos hecho, qué pensamos? Algunas intervinieron y dijeron haber sentido un jalón de orejas y se comprometieron a trabajar más puntualmente. Se sienten felices de poder replantearse el por qué están ayudando, de poder devolver algo de lo que han recibido de Dios. Llegará el momento, a las que ayudan con sus nietos, que estos crezcan y no las necesiten y se habrán desvinculado de la Institución, estas voluntarias prometieron sacar algún tiempo para seguir cooperando. Respecto al trabajo que vamos a hacer, se nos pidió PERSONALIZAR más la relación con la gente. Que sientan que en el Centro son importantes. Personalizar el saludo, tratar de conocer sus nombres. El año pasado dio buenos resultados el pararse en la puerta las coordinadoras y se les preguntaba si había estado todo bien, si tenían problemas, etc.
Luego nos pasaron un power point de LA CARPINTERÍA, el cual se prometió proporcionárnoslo. Se dará a conocer en el Notilola.
El día de hoy fuimos enriquecidas las ocho personas que asistimos. El ritmo de la formación tiene que ser dos veces al mes para las voluntarias, cada quince días, los días martes en la mañana, y una vez a mes para las charlistas, a las que se les pide no intervenir con comentarios o preguntas por interesantes que estas sean. Se recomienda que las preguntas se las presente por escrito al final de la charla que haya dado Maria Jesús.
Se nos ha pedido que tratemos de encontrar nuevas voluntarias, de preferencia gente joven, nuestras hijas o nietas, para formar otra generación y para que ayuden en tareas puntuales que se les designará.
Tener confianza en lo que vamos a hacer. El Señor le dijo a sus discípulos que los enviaba como corderos, no como lobos, y les dijo que expulsarán demonios y curarán enfermos, les dio sus propias facultades. El poder que el Señor pone en nuestras manos es igual al que les dio a ellos. Los mandó de dos en dos.
Expulsamos demonios cuando consolamos a alguien, le quitamos la desesperación. Hay gente que se cree nada, a lo mejor son gente maravillosa, si hablas con ellos y les haces conocer que hay un Dios maravilloso, expulsas demonios. Esta es la explicación de expulsar demonios y de curar enfermos.
En la medida que nuestra vida esté de verdad inserta en Cristo Jesús, es realmente curativa, trasmite vida y salvación. Esto no es nuestro, porque, quien nos envía a una misión con su poder, es El. La primera cualidad es la confianza. No somos nosotros los que realizamos actividades de milagros sino el Señor. Bastará a veces un gesto. Hay que tener responsabilidad porque si el Señor nos entrega ese poder, no lo podemos esconder como una vara debajo de la mesa. Eso no es responsabilidad.
Este año 2008 vamos a usar en Su nombre, nuevamente este poder. Tenemos una tarea que realizar, una misión, si no lo hacemos, dejamos ese hueco, queda un hueco. Cada paso una meta y cada meta un paso.



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